
Hay días que sientes la necesidad de huir, desconectar por unas horas y salir de la monotonía.
Lo primero que se nos pasa por la cabeza cuando escuchamos la noticia de una madre que abandona a sus hijos, es que es una mala madre y no merece ni un ápice de comprensión. Veamos cuáles pueden ser las posibles causas que la llevan a tomar esa difícil decisión.
Es complicado en una conversación acerca del abandono de una madre a su hijo no exclamar un ¡qué horror!, ¡cómo puede ser capaz!, pues desgraciadamente sí pueden. Existen muchos condicionantes, la escasa educación, sobre todo en valores, la edad y falta de madurez, la poca o ninguna economía, el no sentirse preparadas, angustiarse y verse solas. Hay madres que tras serlo sufren de depresión postparto y otras que lo han sido de forma por una acto violento…El contexto familiar y el entorno donde viven puede dar las claves del acto cometido.
Para las que somos madres nos parece impensable abandonar a un hijo, pese a los momentos tan duros que existen. Por supuesto que hay días que sientes la necesidad de huir, desconectar por unas horas y salir de la monotonía, pero ocurre que cuando estás una o dos horas sin ver la cara de tu bebé, olerle y abrazarle, te sientes vacía e incompleta. En estos casos el vínculo es innegable.
En la sociedad en la que vivimos, que sigue siendo machista profundamente, es más lógico escuchar que el padre se ha marchado porque estaba agobiado, que el que lo haya hecho una madre. Para el padre incluso buscamos excusas. Ambos casos merecen una crítica. Los padres, cuando existe una pareja que ha traído al niño al mundo, son dos seres independientes, la responsabilidad es de ambos y a la hora de desesperarse, los dos son los que necesitan evasión.
Cuando eres madre
Cuando eres madres cambias y valoras cosas que antes no veías. Cuando te conviertes en madre has de esforzarte y mejorar día a día. Ser una buena madre no es intrínseco de la genética. Valoras los momentos anteriores que pasabas de ocio y tranquilidad e incluso llegas a añorarlos en muchos momentos. Cuando con tu pareja decías que te aburrías, ahora no tienes tiempo ni para sentarte. El punto de responsabilidad y dependencia que sientes es máximo y si no estás fuerte puede devorarte.
En el momento en que tienes a tu hijo en brazos sientes el vínculo, sientes que es parte de ti, pero puedes verte fuera de dimensión y psicológicamente no estar o no verte preparada para esa responsabilidad. En algunos casos incluso se opta por el abandono porque se desea lo mejor para el niño. De repente eres madre y todo lo anterior se acabó. Has de asumir y entender que debes ejercer y hacer las cosas tú sola y en beneficio de tu hijo. Para alguien que no esté preparado emocionalmente, puede ser un shock.
Un padre, por ejemplo, en muchos casos, tarda más en aceptar la nueva situación. Entiende que ha sido padre cuando ve como su vida está cambiando, cuando su pareja también ha cambiado. El día a día ejerciendo, va dando pistas de lo que será el futuro. El rol de padre y el de madre deben estar fuertemente definidos para no hacerse daño ni hacérselo al pequeño. Un niño se fija en sus padres y absorbe sus actuaciones y sus creencias. Realmente un niño que siente el abandono por parte de una madre, necesitará mucha ayuda para sobrellevarlo.
¿Qué es el abandono de un hijo?

Quien no atiende y da apoyo de tipo emocional, afecto o acompaña a su hijo, también le está abandonando.
La persona encargada del niño, en este caso la madre, si deja de ocuparse de él y darle los cuidados necesarios, lo está abandonando. Normalmente lo relacionamos con el abandono físico, pero también puede repercutir en el área psicológica. Un padre o madre que no lo atienden y le dan apoyo de tipo emocional, afecto o le acompañan, también le están abandonando.
Los tipos de abandono, van desde dejarle en la puerta de un hospital, con una vecina y no ponerse en contacto con él durante tiempo, no atenderle, no procurarle alimentos ni darle cariño durante tiempo, no preocuparse por si necesita algo, no visitarle donde esté…Puede existir una abandono más responsable digamos, cuando se le deja por circunstancias de peso en un lugar a salvo y se pretende que el niño tenga una vida mejor, no obstante es una perspectiva personal y no funciona frente a la ley.
Un niño abandonado tendrá déficit de afecto, inseguridad, baja autoestima, baja autoimagen, no sentirá empatía por el sufrimiento de otros, sentirá seguramente odio o rencor hacia su madre si le ha abandonado, miedos y dudas a la hora de ser padre o madre entre otros problemas psicológicos. Casos en los cuales la madre deja a su hijo en lugares donde puede fallecer son cruentos y durísimos, como los recientes casos de madres que arrojan a sus hijos en contenedores.
Legislación sobre el abandono de un menor
Las consecuencias legales por el abandono de un menor se plasman en los artículos 229 y 230 del Código Penal, existiendo prisión desde 6 meses a 4 años. El abandono de niños se tipifica como un delito grave. El padre, madre o tutor le deja en un lugar y se desentiende como cuidador. En el terreno penal, se define como abandono físico, pero puede abarcar también el aspecto emocional.
Existen países en los que se pena el que sus cuidadores les dejen sin comida, atención sanitaria…, e incluso en otros, se castiga el mero hecho de tener la intención de abandonarlo. Quienes sospechen ese abandono deben denunciar la situación a las autoridades competentes, por la madre y por el niño que es el ser más inocente y carente de culpa que existe.
Causas del abandono de un hijo

No se conocen los motivos que llevan a una madre a abandonar a su hijo, ni qué hay detrás.
Existen causas que afectan a la economía, la salud mental de la madre, el miedo, la violencia…Como sociedad solemos juzgar sin conocer y cada caso tiene una historia detrás. Una madre puede estar sola durante su embarazo y posterior parto, sin ningún tipo de apoyo. En estos casos es donde la mente humana juega malas pasadas y la persona se desestabiliza y actúa de una forma equivocada.
Suelen escucharse historias de niños abandonados, no obstante, no se conocen los motivos que llevan a una madre a hacerlo, qué hay detrás o quién la ha dejado sola. El abandono de un hijo es tremendo y debe velarse por el bienestar del niño, pero pese a ese acto tan reprobable no se debe crucificar a alguien que seguramente lo haya pasado muy mal.
- Bajo o ningún nivel de estudios.
- Bajo nivel económico para hacer frente a los gastos.
- Haber sido una niña abandonada o maltratada.
- Escaso o nulo apoyo familiar.
- Haber sufrido una violación.
- Problemas psicológicos.
Depresión postparto
Existen casos muy graves que necesitan una pronta intervención, de otro modo pueden acabar en serios comportamientos y perjudicar al niño. Los niveles hormonales descienden tras dar a luz y afectan a la mente de la madre. Hay madres que no dañan al bebé, pero sí a si mismas, incluso quitándose la vida. La mujer en el postparto puede necesitar incluso ser hospitalizada si presenta crisis de ansiedad, alucinaciones o cambios de humor.
Entre 5 y 6 mujeres de 10, pueden padecer depresión postparto. Sienten ansiedad, no se ven preparadas para ejercer de madres ni saben cómo, dudan sobre sus capacidades, se sienten agotadas y estresadas…La pareja, si existe, y la familia, deben estar muy atentos, cuidar y preocuparse de la madre tras dar a luz. Lo recomendable es brindarle toda la ayuda necesaria y no agobiarla.
La madre que abandona a su hijo suele ser más distante con otras personas, seguramente influyan la inseguridad, la falta de compromiso…Para un niño puede ser un acto que recuerde de por vida y que le marque en sus futuras relaciones sociales. Las madres necesitan la rutina diaria con su hijo para ir fortaleciendo el vínculo. El principio es muy duro, amas a la personita que ha llegado al mundo, pero todavía no le conoces en profundidad. Conocer, ver, sentir…, forjan los lazos y el sentimiento.
Muchas veces, la madre no encuentra salida, por lo que con sumo cuidado hay que mostrarle que sí la hay. De nada sirve juzgar y suponer. Muchas madres son niñas que no saben ni cuidarse a sí mismas y tiene grandes déficits. Suelen parir sin haber pasado un embarazo deseado ni feliz porque su vida se ve envuelta de dificultades. Cuando afrontas una situación sin deseo, con miedos e inseguridades, si llegas a la meta, lo haces desanimada, agotada y sin atisbar sentido alguno.
La entrada ¿Qué motivos llevan a una madre a abandonar a su hijo? se publicó primero en Madres Hoy.